3 de diciembre de 2011

Compulsivo afán de querer tenerlo todo
no saber decir basta, comer hasta reventar

Repulsiva costumbre del horario
tan apurados por llegar a ningún lugar

Horrible gusto por la burocracia
la falsa seguridad, felicidad mediocre

Desconcertante confianza en profetas
amores de burdel, gobernantes incapaces




Pronto zarparas

Montada en un barco, pronto zaparas
haciendo señas a lo lejos desaparecerás
el sabor del beso de la despedida
tras el cigarrillo se amargará

Si ya no queda nada más que la lluvia
camino a casa buscare un bar
para beberme un whisky mientras
afuera sigue el aguacero

Ebrio, mojado, solo y enrabiado
gritando a todas las parejas en vista
cambiando el rumbo a casa por una
casa de putas en busca de compañía

La misa dominical fue el lugar
donde terminé de pasar
la borrachera, la voz del cura
adormecedora fue perfecta

Me fui a casa, me puse el traje
me fui a buscar a otra
encontré a otra amante
quien también se fue de viaje